Un negocio que roza los 300 millones de pesos –generado del bolsillo del contribuyente– se creará en Río Negro desde agosto, a partir del grabado obligatorio de la patente en la carrocería de los autos.
El gobierno anunciará en los próximos días una medida para que todos los propietarios de vehículos nuevos o usados –autos y motos– pasen por una verificadora para grabar las patentes en las puertas, capot y baúl. Será obligatorio tenerla desde el 1 de agosto y el trámite costará 950 pesos. Restan definir los prestadores del servicio.
Con 300.000 vehículos registrados en la provincia, el monto a recaudar roza los 300 millones de pesos. Sin contar las motos.
Se trata de un nuevo golpe al bolsillo del contribuyente ya que se suma a la verificación técnica anual (800 pesos) y el grabado de cristales (600 pesos).
La medida que permitirá mejorar la recaudación provincial –aunque todavía no se sabe qué porcentaje de este monto tributará– apunta a terminar con el robo de vehículos y su desguace para la venta como autopartes. Ya se aplica en Capital Federal y en las provincias de Buenos Aires, Córdoba y Mendoza.
Se trata de un sistema de grabación en bajo relieve, considerado inviolable. Consiste en un mecanismo computarizado que identifica con el número de patente las diferentes piezas del vehículo.
Publicado en Diario "Río Negro", 7 de junio de 2018.
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