La nueva Ruta 22 avanza desde el este hacia el centro del Alto Valle. La autopista de cuatro carriles ya cuenta con asfalto a la altura de Ingeniero Huergo, donde también se concluyen los pasos elevados.
Según trascendió de fuentes oficiales, la habilitación de ese primer tramo sería en las próximas semanas, ya que el puente que cruza frente a la zona de “la escuelita” está prácticamente listo para ser usado.
Actualmente se trabaja en la conclusión de las defensas laterales, lo que se puede ver a simple vista cuando se atraviesa la zona. Con la capa de asfalto y la señalización de la vía, el lugar estará listo para circular.
De esta forma, quedaría inaugurado el primer puente sobre el que se comenzó a trabajar cuando se dio curso al proyecto de ensanche de la traza. Con su habilitación, no se perjudicará el trabajo en el resto de los sectores, que aún se mantienen en preparación, teniendo en cuenta que son pasos independientes.
Sin embargo, la luz verde que aparece en Huergo se pone amarilla cuando el proyecto de ampliación es abordado por las autoridades de Cervantes.
La intendencia de esa localidad se plegó días atrás al pedido de Roca para evitar que las “murallas” proyectadas por Vialidad Nacional queden instaladas frente a los accesos.
Desde el gobierno a cargo de Claudia Montanaro diseñaron un proyecto alternativo, que será presentado en los próximos días a las autoridades nacionales, ante quienes se solicitará también la posibilidad de participar de la audiencia pública ya pedida por la comuna roquense.
“La elevación que haríamos nosotros abarca el acceso principal, para tránsito liviano. Se trataría de un puente peatonal y vial, que sólo nos comería unos 60 metros para adentro de la ciudad. Desconectaríamos el cruce que quiere hacer Vialidad dentro de Cervantes, que parte a la ciudad al medio”, explicó la intendenta Montanaro a “Río Negro”.
De esta manera, la propuesta busca evitar que el ejido quede atravesado por un puente, lo que generaría una desconexión entre el centro de la ciudad y los barrios cercanos. “Hay que ver qué sucede con los que están a la vera de la ruta, porque Colonia Fátima quedaría frente a la muralla, por ejemplo. En el caso del barrio Virgen de Luján, hemos registrado muchos accidentes sobre el cruce de la ruta. No se puede cruzar si no está el control de la policía caminera”, agregó.
En esta propuesta también fueron materia de análisis los cruces que conectan la ciudad con las poblaciones vecinas. Es por ello que “en el caso del cruce de Roca hacia Regina, se iría por colectora, se sube a la vía y retomamos Ruta 22 al mismo nivel. Mientras que de Regina a Cervantes, debería bajarse por la colectora y se retomaría el ingreso normalmente”, indicó Montanaro.
En ningún caso se prevé una elevación de la traza, sino que por el contrario, por ahora, se mantendrían al mismo nivel. “Los accesos a Roca en Mendoza y San Juan tienen el mismo ancho que los accesos de acá. Si se llega al amparo, estaríamos en condiciones de que se aplique la misma resolución para nosotros”, argumentó Montanaro.
La iniciativa fue elaborada por personal de Obras Públicas comunal, a cargo del arquitecto Gustavo Coria.
Publicado en Diario "Río Negro", 2/5/2017.
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