El legislador Luis Albrieu fue una de las caras visibles de la campaña de María Emilia Soria en el circuito Alto Valle Este. “Fue la campaña más austera de la historia. Teníamos la convicción y las ganas de mostrar un proyecto, una candidata y una ilusión. No hubo movilidad, ni punteros, ni mercadería, nada. Sin embargo, en toda la provincia duplicamos al gobernador con todo su aparato”, reflexionó el ex intendente de Villa Regina, a horas del contundente triunfo del Frente para la Victoria en Río Negro.
Agregó: “Por esto, una de las primeras conclusiones que saco es que la gente vota a los candidatos y no a los partidos. Acá tenemos a una gran ganadora que es María Emilia con guarismos increíbles en toda la provincia. Por supuesto que Regina no es una isla. El gran derrotado es el gobernador que se puso al hombro la campaña y salió tercero con 17 puntos en la provincia contra 41 de María Emilia”.
Este primer análisis lo llevó al siguiente. “No sirven más los aparatos, ni las dádivas ni la entrega de cosas. La gente quiere gestión, quiere estar mejor, quiere que Salud Pública funcione, que el IPROSS funcione, que en las escuelas haya clases. Nosotros tenemos conocimiento que en la toma el día anterior Oscar Díaz y Silvia Morales entregaron colchones, mercadería, cemento. Lo hicieron ahí y en muchas partes”, señaló.
Consideró que “el vecino premia y castiga. En esta elección, como nunca, con todo el aparato de Juntos Somos Río Negro contra la nada nuestra, le ganamos al gobernador. Cambiemos hizo una buena elección pero también una elección previsible. Hay un 20% de gente que acompaña la gestión de Macri en Río Negro y un 80% que no lo acompaña”.
Albrieu no opina que la elección se nacionalizó, como lo manifestó el gobernador Alberto Weretilneck. “Al contrario, se provincializó, se plebiscitó la gestión del gobernador porque él así lo hizo. Él, con sus afiches, con la propaganda, con el uso vergonzoso e indiscriminado de Canal 10 provincializó la elección. La publicidad oficial, sumado a todo desarrollo social en función de una elección, la entrega de tres cuotas de $1500 en mercadería, con $7.000 en tarjetas para la construcción, con la entrega de plata a los clubes de Bariloche, eso es provincializar la elección. Se castigó al gobernador por creer que se puede entregar cosas 15 días antes de la elección y tener 5 años de una mala gestión”, dijo Albrieu.
Además señaló que “el rionegrino premió a una candidata como María Emilia, que es joven, instruida, de un cuadro político con mucho coraje y convicción, con 69 proyectos en la Cámara de Diputados en sus 4 años, con el coraje de recorrer la provincia con un embarazo de más de 8 meses. Yo digo que son como ríos subterráneos, el subconsciente general se pone de acuerdo y vota un candidato”.
Albrieu recordó que “un resultado tan contundente en Bariloche no se obtenía desde 1983 y sin un peso, cuando sabemos que el alto de esa ciudad, que es el 60 o 70% de Bariloche sufre muchas necesidades y es de una gran vulnerabilidad y votó por María Emilia, castigó al gobernador y premió al trabajo y a la seriedad. Es un espaldarazo muy importante para nuestro candidato a gobernador Martín Soria, que sale a discutir a partir de hoy en otras condiciones en el escenario político”.
Sobre lo que significó el triunfo en Villa Regina, Albrieu indicó que “no lo considero un triunfo personal pero lo que sí pude comprobar es que la gente me recuerda con mucho afecto y cariño. Ni un gesto negativo de nadie. La conclusión es que el cariño de la gente de Villa Regina está vigente para mí”.
-Sostiene que fue un castigo de Juntos a nivel provincial, ¿a nivel local también?
“No sale de la media. Creo que de esto Daniel Fioretti salió airoso porque, al margen que se puede cuestionar la calidad de la gestión de su gestió, los que se pusieron la campaña al hombro en Regina fueron el gobernador y los legisladores Silvia Morales y Oscar Díaz, que son los perdedores. Es más le soltaron la mano a Fioretti una semana antes así que puede decir que si hubiera estado él, en vez del 17 sacaban el 20%. Lo puede decir y estar en el espacio de las conjeturas como posible. Él no restó, porque si Regina hubiera sido diferenciada con respecto al resto de la provincia, sí se podía cargar a la gestión de Fioretti. Pero tuvo la media de todas las localidades. Encima lo dejan afuera 10 días antes, de mala manera, con lo cual puede decir que si estaba sumaba un puntito”, opinó.
Señaló que “no creo que en dos meses el porcentaje obtenido por el FpV cambie radicalmente. Cambiemos va a ser lo imposible para obtener los dos puntos que le hacen falta para que entre un diputado. El gran dilema es el gobernador, si se sale de la campaña y se borra pero ya es tarde o sigue poniendo la cara. Pero no creo que cambie mucho, que cambie su gestión que es lo que la gente está reclamando. Puede hacer más de lo mismo y creo que el castigo va a ser igual o peor. El gran dilema de hoy es Alberto Weretilneck, nosotros seguiremos trabajando con nuestra candidata, con nuestro proyecto, mostrando gestión en Roca y convicción y coraje en nuestra candidata”
María Emilia es parte de la renovación dentro del justicialismo rionegrino. ¿Se puede trasladar esta renovación a Regina por ejemplo de cara al 2019?
“Apuesto a la renovación. Creo que Martín Soria con 40 años y candidato a gobernador en el 2019 ya marca todo un mensaje, María Emilia con 31 años sacando estos guarismos también lo es. Creo que en Regina la renovación pasa por un cuadro político muy interesante, con mucha convicción, con mucho trabajo, con mucha seriedad, que quiere mucho a Regina que es Maximiliano Garré que tiene 33 años y que marca un camino”, dijo.
Agregó: “Ojalá que se sumen más jóvenes. No es que me esté retirando pero es bueno ver gente joven, con ganas, que tienen futuro. Quienes tienen entre 25 y 40 años son los que tienen que tomar la posta, y no sólo en la política, en la vida. Garré es la figura que se viene, lo está demostrando en el Concejo Deliberante y en todo lo que hace con mucha convicción, trabajo, voluntad. Ojalá que aparezcan más y que tengamos asegurada una continuidad en el justicialismo de Villa Regina”.
Sin embargo, reconoció sobre una posible postulación a la intendencia de Regina: “El cariño me seduce y es una caricia al corazón. Si la figura de Garré no alcanza a consolidarse en estos dos años como un fuerte candidato a intendente en el 2019 y tengo que jugar yo, ya vengo pensando en alternativas que tienen que ver con el trabajo. Regina necesita trabajo, que tiene que ver con nuestra impronta, que es la fruticultura, la aduana, las universidades, de lo que siempre se habla. Estamos trabajando con algunos asesores para que tengamos alternativas relacionadas con esto. Queremos estar un paso delante de lo que se hizo en los 9 años de mi gestión”.
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