“Continúa el festival de versos” por ALBERTO LINO GUAJARDO.
Estamos cerca de las PASO, elecciones en las que obligatoriamente debemos votar los candidatos que, en octubre, competirán en otra compulsa para lograr una banca como diputado nacional.
Ya no nos sorprende ver, leer o escuchar a los postulantes, poniendo la mejor cara de buenos, honestos y amigables. Todos se han convertido en los mejores defensores de los intereses provinciales. Algunos, manzana en mano, pregonan ser la solución para la problemática frutícola; otros alientan a “tener memoria”, cuando su principal tarea fue acomodar amigo/as sin capacidad, en desmedro de aquellos con indiscutible preparación y honestidad. Y como no podía ser de otra manera, porque son nulos de ideas, algunos apelan a la “bolsita” de mercadería, como si los pobres comieran sólo para las elecciones.
Pero cuando logran el objetivo de darse la gran vida y juntar montañas de plata
–porque en un mes cobran lo que a un/a maestro/a, enfermero/a o policía le cuesta casi un año de trabajo– sólo se limitan a obedecer a quien les dio la oportunidad.
Como prueba de lo que digo, invito a observar la nómina de quién es quién en la votación para expulsar al diputado De Vido.
La ambición por captar votos no tiene límites, ofrecen reducir la jornada de trabajo a seis horas, expropiar las empresas frutícolas, y han hecho un spot publicitario con cuatro obreros a no menos de siete metros de altura sin ningún elemento de seguridad personal.
Tampoco sorprende la diversidad de opiniones en las redes sociales, salvo los acérrimos fanáticos, la mayoría no se muestra convencida por los candidatos, ya sea porque unos son mentirosos, otros corruptos, otros inoperantes y otros sólo “figuretis”.
Ante tamaña confusión, que hace difícil inclinarse por uno u otro, y teniendo en cuenta que los ciudadanos/as tenemos en nuestras manos el arma más letal de la democracia que es el voto, ¿qué les parece si vamos a votar, para no quedar en infracción de la ley electoral, pero no votamos a ninguno? Y esperamos la reacción de la dirigencia política... si es que reaccionan, de lo que tengo mis serias dudas.
Publicado en Carta de Lectores del Diario "Río Negro", domingo 6 de agosto de 2017.
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