La defensora del Pueblo, Nadina Díaz, advirtió a los funcionarios provinciales que si persisten en actitudes entorpecedoras de la labor investigativa de ese organismo de control, podría solicitar la intervención del Poder Judicial para obtener la remisión de la documentación o información que le hubiere sido negada. “Todo ello sin perjuicio de hacer público los incumplimientos que hubieran cometido los funcionarios provinciales; agregó.
En un comunicado de prensa, Díaz explicó que “ante las demoras registradas en la contestación de distintos pedidos de informes realizados por la Defensoría del Pueblo y, en reiterados casos, la falta de respuesta por parte de algunos funcionarios del Estado provincial, la Defensora del Pueblo de la Provincia de Río Negro, Nadina Díaz, comunica a los responsables de las distintas áreas que es obligación responder a las solicitudes o reclamos del organismo de control”.
“La Defensoría del Pueblo recuerda que los funcionarios tienen la obligación de responder en el término máximo de treinta días y, en caso de no cumplimiento, el organismo podrá poner en conocimiento de la situación al Ministro del área o al propio Gobernador de la Provincia”, agregó.
Díaz, advirtió que “ante casos de persistencia o actitudes entorpecedoras de la labor investigativa de la Defensoría del Pueblo, la situación podrá ser destacada de manera especial en el informe anual que este organismo presenta ante la Legislatura, o llegado el caso, solicitará la intervención del Poder Judicial para obtener la remisión de la documentación o información que le hubiere sido negada. Todo ello sin perjuicio de hacer público los incumplimientos que hubieran cometido los funcionarios provinciales”.
En su última recorrida por pueblos y parajes del sur de la provincia, la defensora del Pueblo, Nadina Díaz, recibió un particular reclamo de los vecinos de Arroyo Los Berros. Para el asombro de la funcionaria y su equipo de trabajo, los ciudadanos del lugar manifestaron que “a pesar del nombre del lugar, allí no había arroyo y mucho menos berros”.
Se explicó que los problemas para esta localidad, comenzaron a principio de la década del 70, cuando el gobierno militar decidió entubar los arroyos Ventana y Los Berros, con el objetivo de proveer de agua a la empresa minera HIPASAM, poco pudieron hacer para evitar que tan autoritaria medida terminara con la vida del lugar, tal cual lo habían conocido.
En nota entregada a la defensora, los vecinos manifiestan que el arroyo Los Berros que le dio nombre al paraje “nos permitió crecer a sus orillas con un paisaje muy diferente al actual, árido y desértico, por lo tanto, necesitamos rediseñar este sistema hídrico de manera de compartir el agua con Sierra Grande pero recuperar nuestro arroyo”.
FUENTE DE INFORMACIÓN: ADN RÍO NEGRO.
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