Hay que evitar que el vino rionegrino desaparezca.

NUEVAS EXPECTATIVAS EN EL SECTOR VITIVINÍCOLA.

Hay que evitar que el vino rionegrino desaparezca.

Con un importante respaldo político, subsidios, capacitación y la participación de distintos referentes de la actividad se busca recuperar el terreno perdido.

Entrevista del Diario "Río Negro" al Ing. Mario Tassara flamante director de vitinicultura de Río Negro.

Producir vinos de calidad y con una clara impronta rionegrina es uno de los mayores desafíos que propone encarar el reginense Mario César Tassara, flamante director de Vitivinicultura de la provincia. El sector aspira a reposicionarse y a recobrar el impulso perdido tras décadas de postergación.

"En los últimos años la vitivinicultura en Río Negro ha ido decayendo en forma notoria. De 12.000 hectáreas que teníamos hemos bajado a 1.500", precisó el funcionario, quien destacó que hoy existe una "firme decisión política" de acompañar a la actividad "no sólo mediante aportes nacionales sino también con esfuerzos provinciales".

En este sentido, confirmó que la semana pasada se concretó el envío de los fondos correspondientes a la segunda etapa de los créditos otorgados a través de la Corporación Vitivinícola Argentina (Coviar), cuyo monto asciende a 1,5 millones de pesos. En tanto, se espera que en pocos días más se haga efectiva la entrega de otra suma similar para completar el saldo restante.

"Nos estaríamos asegurando un aporte de Nación y paralelamente la provincia va a intentar alcanzar a quienes no hayan sido contemplados dentro de los programas que ya se lanzaron", apuntó.

Además, una vez que esta ayuda llegue a los productores y bodegueros que la solicitaron en el 2011, la provincia estará lista para acceder a otros 3 millones para volcar nuevamente a la actividad. "La condición para que Nación nos gire otros 3 millones es que se cancele el pago de los anteriores", explicó Tassara, quien adelantó que se prevé hacer una nueva convocatoria para que "nadie se quede afuera".

Al respecto aclaró que, si bien la metodología de distribución no se modificó, en esta oportunidad buscarán garantizar la transparencia del procedimiento para que el cumplimiento se dé en tiempo y forma. Cabe recordar que durante la anterior administración el desvío de las cifras comprometidas dilató su cobro y generó incertidumbre entre los beneficiarios, muchos de los cuales aún aguardan en lista de espera. Apenas se instrumente el pago, "los que no recibieron nada en el 2011 serán la prioridad número uno", aunque pasados varios meses de su otorgamiento los fondos sufrirán una inevitable depreciación.

El interés excluyente de la nueva gestión es "llegar hasta el último productor con conocimientos, experiencia y ganas de recuperar la vitivinicultura". Con este propósito, buscan avanzar en la elaboración de un relevamiento para contar con datos precisos sobre la cantidad de emprendimientos que aún siguen en pie y esperan auxilio para no desaparecer.

"Nos planteamos ubicar en el censo incluso a aquel que conserva media hectárea o la superficie que sea. Creo que es primordial llegar al productor más chico y a la bodega más chica en orden creciente hasta el más grande, con la meta final de producir un vino de calidad que tenga una clara identificación rionegrina porque sabemos que es posible", aseguró. "Tenemos bodegas que por sí solas o con algún apoyo de la provincia en determinado momento han llegado a niveles importantes", resaltó.

El énfasis estará puesto en acercar alivio y "tratar de salvar al pequeño productor y desde ahí hacia arriba para integrarlos primero a las bodegas zonales y después en conjunto apuntar a hacer un vino que tenga un corte distinguidamente rionegrino".

Tassara remarcó que "a pesar de las condiciones adversas sobrevive una gran conciencia vitivinícola y ésa es una de las cosas que queremos rescatar, además de la experiencia de los más viejos, a quienes tenemos que brindarles las condiciones para que puedan transmitir todo lo que saben sobre todo porque ante la decadencia de la actividad los jóvenes huyen", lamentó Tassara.

Fomentar el asociativismo y promover "el consumo de nuestro vino entre los rionegrinos" son dos de las tareas a las que se abocará el titular de Vitivinicultura. "En Río Negro somos unos 500.000 habitantes. Si consumimos vino de acá, nos sobra gente para colocarlo tomando en cuenta el promedio de consumo. Lo mismo ocurre con el champagne. Supongamos que se toma una vez al año, en el sur reunimos un millón de habitantes que podrían absorber unas 500.000 botellas que actualmente no estamos produciendo por el abandono que el sector sufrió durante los últimos 30 años". En relación con las posibilidades de avanzar en proyectos de asociación, Tassara sostuvo que "es más fácil que en la fruticultura porque tenemos menor cantidad de actores y menor incidencia de cuestiones internas".

Por otra parte, comentó que la creación de un vivero es otra de las metas a desarrollar "para poder abastecernos sin tener que recurrir a otras provincias. Hacen falta plantas y podemos cultivarlas acá porque tenemos todo para conseguir un material excelente, sin necesidad de estar corriendo riesgos sanitarios", sostuvo.

En cuanto a la falta de opciones de capacitación para productores y bodegueros, se intentará revertir esa situación mediante la firma de un convenio con la Agencia Provincial para el Desarrollo Económico Rionegrino (Crear), la cual generará distintas propuestas tendientes a brindar asistencia en esta materia.

Facilitar el acceso a maquinarias, financiación y programas en aras de concretar la reconversión varietal es otra de las apuestas que la nueva gestión afrontará.

El nombramiento de un referente propio a cargo del área facilitará a los productores la vehiculización de sus inquietudes y demandas ante el Ministerio de Producción, ya que hasta ahora estaban bajo la órbita de la Secretaría de Fruticultura, presidida por Oscar Rolo, quien desempeñaba ambos roles. Las medidas que se anuncian comienzan a delinear un camino orientado a la protección de la producción primaria para que deje de ser la variable de ajuste y a frenar el marcado retroceso que la actividad ha registrado en los últimos años.

Reportaje de Lorena Faath publicado en el Suplemento "El Rural" del Diario "Río Negro" (edición Nro. 22.864), sábado 7 de abril de 2012, pág. 5.