Guerra de Malvinas: 30 años de negación nacional por Sergio Plos.

La siguiente nota de opinión fue publicada por el Editor de Diario "El Globo" de Villa Regina, Sergio Plos.

Cuenta su parecer e historia personal de la guerra o combate de Malvinas y de uno de los ex-combatientes de Villa Regina. Me gustó su relato y lo difundo para conocimiento de los Lectores y las Lectoras de este EL REGINENSE.

Guerra de Malvinas: 30 años de negación nacional.Aún recuerdo esa fría tarde de junio cuando nos avisaron que llegaba al continente Daniel. Venía de las Islas y era de Villa Regina. Por esos días se extrañaba todo lo que era de Villa Regina y hasta era lógico en un chico de 17 años que había dejado todo en pos de “estudiar” lejos de la “casa”...
Tengo, luego de 30 años, grabada la barrera y una calle de ingreso al BIM3 Batallón de Infantería de Marina) de Ensenada (ciudad contigua a La Plata donde habían llegado los combatientes...) Recuerdo haber ido hasta allí con mi abuela Adela... Preguntábamos por Daniel, dábamos su apellido y los militares encargados cotejaban listas, la gente se impacientaba, hasta que empezaron a salir algunos de ellos de una fila y saludaban a los parientes, la emoción iba in crescendo...
Se iba haciendo de noche con la rapidez del invierno y por fin, luego de pasar por el terrible momento de mirar en la lista de “desaparecidos”, llegó al tranco manso Daniel, con la mirada tranquila que siempre le había conocido en la escuela 58 donde cursaba un año delante mío, el mismo gesto de grandote bueno, porque Daniel era de esos grandotes buenos que había en la escuela del barrio Belgrano, que también es su Barrio...
Le pregunté como estaba y sus respuestas fueron un tanto lacónicas, seguramente él hubiera esperado alguien de su familia en nuestro lugar, nosotros por otra parte creíamos que ver alguien de Regina, de su pueblo, le haría mejor que no ver a nadie.... Han pasado 30 años y jamás le pregunté por ese momento que tal vez ni recuerde en medio de lo que debe haber significado el “shock” más notable que ha sufrido nuestra generación...
30 años han pasado y me da la impresión que no le hemos preguntado nada a Daniel, ni al resto de los ex combatientes, solo hemos farfullado tímidamente por una pensión de los soldados movilizados continentales (que no estuvieron en el frente de batalla, que no pisaron las Islas Malvinas...)
Nuestra sociedad ha callado el tema como si se tratara de algo vergonzoso. Me pregunto si nuestro pueblo les habrá dado una casa y un trabajo a Daniel y al resto de ellos, o al menos si se lo han ofrecido... Tal vez lo hicieron en silencio y no nos hemos enterado...
Lo que no he visto son las gigantografías en la que si gastan plata los políticos, una bien grande que diga Héroe de Malvinas, nada más que eso... Porque a nadie le pidieron ser Héroes... Pero de que manera habría que llamar a un muchacho de 18 o 19 años que fue al infierno y que al regresar le esperaba otro peor...?
Seguramente los combatientes no quieran hablar del tema, o tal vez nos les gusten los homenajes, pero nosotros tenemos la obligación de rendirlo....
En nuestro pueblo lo podemos hacer con nombre y apellido, pero me da la impresión que no lo hacemos... Nuestros hijos podrían saber de esa manera quien es quien, y tendrían la posibilidad de saber la historia de primera mano...
Qué tipo de futuro queremos si despersonalizamos nuestra propia historia...?
Me da la impresión que hay una tendencia en nuestro pueblo a rendirle homenaje a tipos lejanos que no nos insuman más sentimientos que el de cuatro palabras vacías para zafar de la ocasión...
Así no tenemos verdaderos fundadores del pueblo, así no tenemos víctimas de la represión del golpe militar y asesino de 1976. Así no tenemos Héroes de Malvinas...
Espero no haber ofendido con estas líneas la memoria de nadie, solo quise ordenar mis recuerdos que son sencillos y quizá poco dignos de una crónica...
En esa mezcla rara de patriotismo y sentimiento de estafa, los argentinos, entre los cuales estamos los reginenses, creo que nos hemos olvidado de lo más sencillo, de lo más elemental... No somos solidarios en realidad...
Luego de 30 años todo el pueblo tendría que ir a esperar a Daniel, hacer de esto una tradición, cantar loas en su nombre y en el de los que se quedaron para siempre en las Islas, como así también a los que murieron en medio de la peor de las miserias y el olvido años después en tierra firme...
Daniel es un héroe a mi modesto entender y cada vez que me lo cruzo lo confirmo en mi mente, un héroe que no es de película, es real y es por sobre todas las cosas, nuestro...
 Sergio  Plos.

Publicado en Diario "EL GLOBO DE VILLA REGINA", martes 3 de abril de 2012 (edición papel Nro. 501-edición digital Nro. 573).

Desde REGINENSE vaya el reconocimiento a los Ex-Veteranos de  Malvinas de nuestra Ciudad: Mario Antonio Munafó, Martín Daniel Giles, Carlos Provoste, Pedro Quesada y Alberto Tavernini.

A Daniel... un chico de la guerra
Autor: ALBERTO  CORTEZ.

A mí los dieciocho me pasaron de largo,
estrenando opiniones, intenciones y cantos,
a esa edad, como todos, con el puño cerrado,
en las puertas abiertas el futuro esperando.

Al tuyo, bruscamente te lo desamarraron
y te hiciste a la niebla en el mar del espanto,
encallaron tus sueños Daniel, en la turba y el barro,
fue la muerte bandera y la vida un milagro.

Lo mío fue distinto, Daniel,
lo mío no fue nada,
yo no tengo esa sombra
que vaga en tu mirada.

Mi batalla fue el riesgo de un "machete" escondido
y mi "pozo de zorro", un amor y un olvido,
mi fusil, las pintadas en los muros vacíos
y morir por la Patria, un discurso florido.

Tu excusa de ser hombre fue algo más que el motivo
de la barba y el porte y el salir con amigos,
fue volverte habitante, Daniel, de la lluvia y el frío,
asumir el naufragio con los cinco sentidos.

Lo mío fue distinto, Daniel,
lo mío no fue nada,
yo no tengo esa sombra
que vaga en tu mirada.

Para mí fue un asunto de madre preocupada
que no fuera muy tarde mi regreso a la casa,
de domingo a domingo me peinaba las alas
sin andar cada jueves reclamando su alma.

La tuya, sin embargo, agotaba hasta el alba
las escasas noticias de las islas lejanas,
aunque fuera un indicio, Daniel, un rumor le bastaba,
aunque fuera mentira, era ya la esperanza.

Lo mío fue distinto, Daniel,
lo mío no fue nada,
yo no tengo esa sombra
que vaga en tu mirada.

El tiempo irá trayendo la amnesia inexorable ,
habrán muchas condenas y pocos responsables,
dirán que fue preciso, dirán, inevitable
y, al final, como siempre, sera Dios el culpable.

La historia necesita en sus escaparates
ocultar el trasfondo de tanto disparate,
no es tuya la derrota, Daniel, no cabe en tu equipaje,
acaso las gaviotas otra vez en el aire.

Lo mío fue distinto, Daniel,
lo mío no fue nada,
yo no tengo esa sombra
que vaga en tu mirada.