Por: Celeste Cerezuela.
En el Galpón de las Artes, donde la historia de Regina se cruza con la emoción de los rostros, se presenta una exposición única que ha capturado el alma de la ciudad. "100 Años, 100 Retratos" es la muestra de dibujos a lápiz que realizó Marta Basabe, una ama de casa que, hace 15 años, decidió adentrarse en el mundo del arte, un mundo que, con el tiempo, la ha llevado a descubrir una pasión inquebrantable por los retratos.
[caption id="attachment_26312" align="alignnone" width="1920"] Algunos retratos de la muestra[/caption]
Un viaje personal hacia los rostros.
Marta Basabe no es una artista convencional. A diferencia de muchos que comienzan su carrera artística desde jóvenes, Marta dio sus primeros pasos en el mundo del arte ya en la adultez. "Empecé a pintar y dibujar hace 15 años. Al principio, me dediqué a hacer de todo un poco, pero pronto me di cuenta de que lo que más me atraía era retratar a las personas", cuenta con una sonrisa en el rostro mientras observa su propia obra en las paredes del Galpón de las Artes.
El proyecto que se expone este mes, sin embargo, tiene una historia particular. Con motivo del centenario de Regina, Marta decidió rendir homenaje a su ciudad de una manera muy especial: con 100 retratos. Pero no cualquier tipo de retratos. La idea era capturar los rostros de aquellos que de algún modo contribuyeron a la construcción de la identidad local.
"Como se aproximaba el centenario de Regina, pensé en hacer algo distinto, algo que tuviera que ver con nuestra gente. Fue así que comencé con Silvana Macoritto, quien me ayudó a dar forma al proyecto", explica Marta, mientras recuerda cómo fue el proceso de pedir permiso a cada persona, o en muchos casos, a los familiares de aquellos que ya no están, para obtener fotos con las que realizar los retratos.
Un año y medio de dedicación.
Hacer más de 100 retratos a lápiz no es tarea sencilla. Marta dedicó un año y medio de su vida a plasmar, uno por uno, los rostros de amigos, familiares, vecinos y personalidades locales que forman parte del tejido social de Regina. La técnica que eligió fue el lápiz, y luego los retratos fueron coloreados a mano, lo que les dio una textura única. La exposición es, sin lugar a dudas, un verdadero testimonio del amor por el detalle y la dedicación. Para Marta, cada trazo, cada sombra, cada mirada que dibujó en el rostro de los reginenses es un reflejo de su respeto por las historias y las vidas que forman parte de su ciudad.
Un homenaje con arte
A lo largo de su vida, Marta participó en seminarios y talleres con artistas locales y de Buenos Aires, lo que le permitió perfeccionar sus técnicas y dar forma a una obra que, según ella, tiene un fuerte componente emocional. "Fue muy lindo hacerle este regalo a Regina, y de alguna manera homenajear a esas personas queridas que han dejado huella en la sociedad. Me siento feliz de poder compartirlo con todos", comenta, con la humildad propia de quien hace del arte una forma de expresión más personal que profesional.
Es imposible no sonreír mientras se recorre la exposición, ya que, al ver los retratos, muchos de los visitantes reconocen en ellos a amigos, vecinos o familiares. Los ojos de Marta, llenos de cariño, logran capturar algo más que una simple imagen: parecen ser una ventana hacia la esencia misma de las personas que han formado parte de la historia local.La muestra estará abierta durante todo el mes de noviembre, no se la pierdan.
Publicado en LA COMUNA DE VILLA REGINA.
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