Desistieron de construirla como una autovía. Cruces de pueblos serán elevados y se terminaría en 2014.
La Ruta 22 desde Godoy a Cipolletti se transformará en una autopista, lo que permitirá agilizar el tránsito al no tener interferencias con la circulación de vehículos que cruzan de norte a sur y viceversa.
La traza contará con puentes elevados en los ingresos a cada una de las localidades comprendidas entre Godoy y Cipolletti, a los que se sumarán otros ubicados cada tres kilómetros. A lo largo de todo el recorrido la autopista contará con calles colectoras sobre las márgenes sur y norte, con lo que se busca que los vehículos que circulan entre las chacras lo hagan por ellas, lo que descomprimirá el tráfico de la actualmente saturada ruta.Con las obras, la Ruta 22 se transformará en la primera autopista de la provincia de Río Negro y permitirá dar una solución durante los próximos 30 años para el tráfico en la región, según estimaron ayer en la presentación del proyecto que se realizó en el municipio de Godoy. Del acto participaron el titular de Vialidad Nacional en la provincia, ingeniero Arturo Montero de Espinosa, junto a técnicos del organismo. Además estuvieron los jefes comunales de Godoy, Huergo y Cervantes, Luis Ivancich, Miguel Martínez y Gilberto Montanaro, respectivamente, y el legislador provincial Juan Domingo Garrone.De acuerdo con las previsiones, los trabajos de ampliación estarán terminados para fines del 2014 en todo el tramo de Godoy a Cipolletti."En principio el proyecto se pensó como una autovía, similar a la construida en el primer tramo de Chichinales a Godoy, pero teniendo en cuenta el crecimiento geométrico del tránsito y la necesidad de dar una solución, se pensó en la autopista" indicó el ingeniero Andrés Porro, técnico de Vialidad Nacional.La autopista tendrá cuatro carriles, dos para cada sentido de circulación, más calles colectoras paralelas, a lo que se sumarán pasos elevados de la ruta en los ingresos a cada una de las localidades y otros similares cada tres kilómetros, que servirán para retomar y cruzar de un lado a otro sin interferir con el tráfico de la 22. Las colectoras a su vez tendrán un doble sentido de circulación sobre los tramos que están frente a cada una de las ciudades, mientras que luego solo tendrán una mano."Cada carril tendrá un ancho de 7,30 metros, por lo que habrá un carril rápido y otro lento, tendrá una banquina pavimentada de tres metros de ancho, mientras que las colectoras tendrán un ancho de seis metros, con banquinas de un metro. El ancho total de la ruta será de 34 metros. Los puentes tendrán una altura de 5,10 metros y una luz de 22 metros. Es decir que la ruta pasará a ser una autopista de categoría uno, similar a las principales autopistas de Buenos Aires" detalló.Además, para mejorar las condiciones de seguridad los cuatro carriles tendrán un divisor central de bloques new jersey, de 1,20 metros de altura, una estructura similar estará sobre los bordes de las banquinas norte y sur, al igual que las colectoras. "Esto hace a la seguridad, por que no se podrán cruzar personas ni animales" comentó el ingeniero de Vialidad Nacional, mientras que se prevé que la velocidad de circulación será de 120 kilómetros por hora.Entre otros detalles, Porro apuntó que los puentes elevados tendrán accesos construidos con terraplenes de tierra. "Se está avanzando en todo el movimiento de suelo, por lo que se prevé que lo primero que se hará serán las calles colectoras para poder desviar el tránsito al momento de construcción de los puentes", indicó.
* Fuente de información e imagen: Diario "Río negro", 24 de agosto de 2012.
[edición Nro. 23.002]
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