Lo que era previsible…ocurrió.
Lo que era previsible…ocurrió.
Un hecho policial ocurrido anoche en Ing Huergo, da cuenta que un productor mato de un escopetazo a un ladrón que huía con una bolsa de cebolla. El productor permanece detenido a disposición de la justicia, mientras el cuerpo forense en Gral Roca, realiza la autopsia correspondiente, que sumado a las pericias de criminalística formaran parte del expediente judicial. Ese expediente será materia de discusión si el hecho fue en legitima defensa o si hubo exceso en la misma. Es decir inocente o culpable.
Un hecho policial ocurrido anoche en Ing Huergo, da cuenta que un productor mato de un escopetazo a un ladrón que huía con una bolsa de cebolla. El productor permanece detenido a disposición de la justicia, mientras el cuerpo forense en Gral Roca, realiza la autopsia correspondiente, que sumado a las pericias de criminalística formaran parte del expediente judicial. Ese expediente será materia de discusión si el hecho fue en legitima defensa o si hubo exceso en la misma. Es decir inocente o culpable.
Lo que se veía venir…lo que faltaba… un ”hecho” que mostrara literalmente, sobre la delgada línea en que se encuentran productores y vecinos que habitan (que viven y trabajan) en el ámbito rural. La delgada línea que nadie quiere cruzar, pero que en caso de urgencia, de robo, asalto, entraderas o como en el imaginario delictivo se pueda denominar, el propietario se vea obligado a utilizar un arma.
No debe haber una sola chacra en donde sus moradores no tengan a mano desde una veterana escopeta hasta las armas cortas o largas y de diferentes calibres…la cuestión es que éstas, en momentos de sosiego, dan un plus mas de tranquilidad y una sensación de seguridad…la cuestión cambia cuando los perros ladran, cuando se altera la quietud de la chacra o cuando no son los ruidos habituales…un tractor, una maquina curando de noche, etc…
Algunos dirán que siempre ocurrió, pero en la última década la inseguridad en las chacras se fue incrementando. Los reclamos se repiten año tras año, sobre todo a la policía y la justicia… las respuestas en algunos casos han dado resultado; en otros fueron solo parches para frenar la bronca.
Lo que queda evidente es que ante nuevos paradigmas se necesita un cambio de leyes. Todas las necesarias para desterrar el demagogo garantismo que se instalo en estrados judiciales, todos los cambios que otorguen herramientas, que devuelvan a la justicia el poder punitivo frente al delincuente, con un mensaje claro a todos aquellos que pretendan desafiar a la ley.
Ojala los vientos de cambios que soplan por estos días, logren persuadirnos que vamos por el camino correcto, por ahora observo solo preocupación en muchos productores que acostumbrados al trabajo diario y digno de producir, tienen que sumar una más. Ya que por defender lo suyo, en un abrir y cerrar de ojos, pueden pasar de ser víctimas a ser victimarios.
Silvio Rodríguez.
*** Publicado en LU 16 Radio Río Negro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario