Si bien desde ayer son varios los automovilistas que al ingresar a barrio Nuevo descienden la velocidad de manera abrupta al encontrarse con la señalización que advierte la presencia del radar, desde APSV se aclaró hasta el momento no se cuenta con la autorización final que emite la Secretaria de Comercio de Nación, trámite que se retrasó debido al cambio de autoridades que tuvo dicho organismo.
“Los radares ya fueron calibrados y están autorizados por el INTI, por lo que en poco tiempo comenzarán a funcionar”, señaló el director de APSV Marcelino Di Gregorio a este medio. De todas maneras, el referente provincial remarcó que antes de comenzar con la aplicación de multas habrá un período de concientización.
Concluida la etapa de concientización sobre la autovía, los radares estarán habilitados para infraccionar en caso de no respetarse las velocidades máximas (de hasta 60 Km en los accesos a Regina) o por el no funcionamiento de las luces.
Los dos radares fijos fueron instalados a la altura de barrio Nuevo y en cercanías a la Aduana. En julio el INTI comenzó a trabajar en su calibración y dicha tarea finalizó hace poco tiempo.
En la actualidad el monto de la infracción está estipulado en 300 unidades de multa y cada unidad equivale a un litro de nafta Infinia de los valores de Viedma.
Una vez hecha la multa, existirá un plazo de 25 días hábiles para notificarse al infractor, caso contrario se anula la falta, según se explicó en su momento desde la APSV.
Cabe recordar que los radares fueron instalados en esta ciudad en el marco del Plan de Seguridad Integral anunciado el año pasado por el Gobierno rionegrino, programa cuyo objetivo principal es reducir la tasa de siniestralidad vial dentro del territorio provincial. Los equipos fijos controlarán a los automovilistas que circulan por los carriles de ambos márgenes de la autovía. Los mismos enfocarán las patentes y controlarán las velocidades y las luces.
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