Señor presidente de la Federación de Bomberos Voluntarios de Río Negro.
En virtud de la investigación publicada en el diario "Río Negro" respecto del destino de los $ 43.000.000 aportados a la Federación que nos nuclea y destinados a la compra de unidades y equipamientos para las 36 asociaciones que la integramos y frente al silencio absoluto de vuestra parte sobre compromisos asumidos en asamblea, sentimos la necesidad de informar a nuestra comunidad y a las demás asociaciones nuestro malestar y desasosiego y las razones que los motivan.
Ante todo, queremos agradecer al señor gobernador de Río Negro el subsidio que entregó a la Federación, que en la historia de nuestra provincia y de las asociaciones de bomberos resulta el más importante tanto en su significatividad como en su intención política de pretender, con dichos fondos y a través de la organización que nos nuclea, dotar de autobombas y equipamientos a cada cuartel.
Lo reprochable y lamentable en todo esto es que el presidente de la Federación, señor Aníbal Tortoriello, desoyera vuestra pretensión y, en vez de convocar a una asamblea para consultar y analizar la necesidad de cada cuartel, distribuyera los fondos aportados de un modo autónomo, arbitrario e inequitativo, mediante operaciones comerciales innecesarias y atípicas e incluso no considerando presupuestos de otros proveedores reconocidos en el ámbito bomberil.
A modo de ejemplo puede citarse el caso de la asociación de la ciudad de Cipolletti, a la que causalmente pertenece el propio presidente de la Federación, que fue destinataria de una escalera por un valor aproximado de $ 5.000.000, mientras que los cuarteles de las ciudades de General Roca y Villa Regina sólo recibieron sendas escaleras cotizadas en $ 500.000 cada una, que, en nuestro caso, ni siquiera cumple con los estándares y requerimientos expuestos en diversas oportunidades al propio dirigente.
Asimismo, de la publicación en el diario "Río Negro" del 8 de diciembre del 2015 surge que la compra la efectuaron a través del importador Federico Hinz, con pésima reputación en el rubro atento información brindada por organismos nacionales, y triangulando la adquisición a través de la República Oriental del Uruguay con la firma Reditrans SA por valores mucho mayores a los que surgían de las facturas proforma que nos exhibieran ante nuestro primer requerimiento en la propia Federación.
Tal irrazonabilidad en los costos de las operaciones realizadas con tales fondos resulta notoria si se contrasta el supuesto valor de los vehículos adquiridos con el presupuesto de camiones modelo 2000 totalmente equipados, elaborado por el importador Fernando Piñeiro –reconocido en nuestro ámbito–, que fuera brindado por nuestra asociación; colaboración que, obviamente, fue totalmente desechada sin justificación alguna.
Los firmantes, como Asociación de Bomberos Voluntarios de Villa Regina, tenemos una conducta de trabajo transparente, abierta a la comunidad y respetuosa del esfuerzo que realiza cada habitante para el mantenimiento del cuartel y, con sustento en dicho compromiso y más de nuestro lugar como miembros de la Federación, es que le exigimos al señor presidente de la misma que sin dilaciones brinde las explicaciones correspondientes y exhiba todos los documentos que avalan las operaciones comerciales.
Omitir el cumplimiento de las obligaciones que expresamente asumió determina que exista una fundada sospecha sobre su proceder en la administración y disposición de los fondos aportados hace más de 10 meses, pues más allá de ser su obligación legal en virtud del cargo que ejerce tiene el deber moral de brindarlas, ya que se trata de fondos públicos destinados a dotar de herramientas necesarias para garantizar la vida, seguridad y tranquilidad de las familias bomberiles y de todo el pueblo rionegrino.
Comisión Directiva
Asociación de Bomberos Voluntarios de Villa Regina.
Publicado en Cartas de lectores del Diario "Río Negro" (Edición Nro. 24231) página 22, domingo 17 de enero de 2016.
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