El Club Chichinales tenía proyectado un centro deportivo en los terrenos que pretendía en la localidad. Foto: Néstor Salas |
Un reciente fallo dictado por la Cámara de Apelaciones en lo Civil y Comercial condenó al Club Social y Deportivo Chichinales a perder 48 hectáreas de tierras en las que tenía proyectada la construcción de un centro deportivo y cultural, revirtiendo un fallo anterior a partir de una demanda iniciada por la institución para lograr el desalojo de una familia que ocupó parte de esas tierras.
La misma Cámara denegó al club la posibilidad de recurrir el fallo, por lo que presentarán un recurso de queja ante el Superior Tribunal de Justicia para que se ratifique el fallo favorable que habían logrado en primera instancia.
El Club Chichinales había iniciado una demanda para lograr el desalojo de una familia que ocupa parte de las tierras, demanda por la que en 2012 el juzgado en lo Civil 1 a cargo de la jueza Adriana Mariani, logró un fallo favorable reconociendo la propiedad y posesión de un predio de 79 ha, ubicado a pocos metros de la planta urbana de Chichinales.
El predio formaba parte de uno mayor, de 100 hectáreas, que el club había recibido en donación y escrituró en 1995. Sin embargo el lote quedó reducido a 79 hectáreas luego de la donación de 21 hectáreas al IPPV para la construcción del barrio Padre Rondini y el polideportivo municipal.
Si bien en principio había logrado un fallo favorable, la familia demandada por el club para lograr su desalojo presentó una apelación que fue tratada por la Cámara de Apelaciones en lo Civil y Comercial de Roca, que revirtió en todos los términos el fallo anterior y dio la tenencia de 48 hectáreas a la familia que ocupa el predio.
Aunque integrantes de la comisión directiva presentaron a su vez un pedido de apelación al fallo, la misma Cámara denegó el 19 de agosto la posibilidad de recurrir la sentencia, por lo que presentará un recurso de queja ante el STJ. "Consideramos que el fallo es arbitrario y que hay una mano negra detrás de todo esto", señalaron desde del club. Además apuntaron que "en el primer fallo que se logró había quedado en claro que la familia que ocupó el predio no cumplió con los 20 años para pedir la tenencia, y que alambraron el lugar durante los últimos años".
"Creemos que atrás de todo esto hay personas que están interesadas en esas tierras por su proximidad, y que la familia que ahora obtuvo el fallo de la Cámara está sirviendo como testaferro", agregaron.
Fuente de información: Diario "Río Negro".
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