Común y como parte de una práctica social se ha tornado la utilización de apodos o sobrenombres a la hora de referirse o dirigirse a alguna persona, algo que mayormente nace y está más presente en la etapa adolescente-juvenil.
Sin embargo el contenido del mismo varía de un caso a otro y suele ser interpretado de distintas maneras por parte de los receptores.
Así lo que para algunos es inofensivo y forma parte de un código o modo de divertirse junto a sus compañeros o amigos, para otros puede transformarse en algo ofensivo y en dolores emocionales que, a su vez, luego puede traducirse en conflictos, agresiones o menosprecio que no hacen más que desvirtuar la identidad de cada uno de acuerdo a su personalidad.
Atento a esto y al inmediato antecedente que arrojó los festejos del baile del estudiante 2010, para este año los padres apoyaron la realización de esta tradicional celebración de la juventud reginense decidieron dejar sin efecto lo que se conoce con el nombre de “escarches” por considerarlos ofensivos en muchos casos. Si bien esto no fue aceptado por los jóvenes, debieron acatar lo resuelto por los grandes. “Lo que hicimos fue ponerle un punto final a este tema que ya se tornaba hiriente, sobre todo, cuando se hacían mención a la inclinación sexual. Para algunos era algo para trabajar en el año en los colegios y no para tratar esa noche (por el baile que se desarrolló el pasado miércoles 21), sin embargo creímos que era el momento ideal para cortar esto”, indicó un integrante de la comisión de padres que ayudó a la organización del baile estudiantil.
Quien se expresó por el tema fue el Consejo Comunitario de la Niñez, Adolescencia y Familia de Villa Regina al manifestar su opinión contraria a estos “escarches”. En tal sentido, este año el Consejo ha intervenido en diferentes encuentros con los organizadores llamando a la reflexión sobre las consecuencias discriminatorias que producen ocasionando humillación y dolor en quienes son afectados.
No escapa a este tema lo sucedido recientemente en Estados Unidos cuando un adolescente de 14 años se suicidó cansado de recibir burlas en el colegio y por Internet a causa de su homosexualidad.
En relación a lo descripto hasta aquí, quien se adelantó y ya está trabajando en esta temática desde los primeros meses de este año a través de un proyecto institucional de convivencia es la escuela primaria N° 302 de Godoy. En ese sentido, y producto de un proceso de evolución, la institución decidió intervenir por medio de distintos interrogantes: ¿Qué nos pasa cuando nos llaman de forma diferente? ¿Qué pasa con mi nombre? ¿Qué problema surgen?
Con el objetivo de apuntar a la identidad de cada uno y sin afectar su estado emocional, la escuela realizó una jornada institucional en la que cada grado trabajó en forma planificada, utilizando distintas estrategias y se socializaron luego las reflexiones para concluir en la construcción de un acuerdo al respecto. Se trata de la eliminación paulatina de los apodos, sobrenombres, hasta incluso las malteadas que se dan ante cada cumpleaños, para de esta manera abrir un camino de respto que permita mejores vínculos, ver que existe otra manera de actuar y de ser junto al otro.
(*) Nota de contratapa de la edición Nro, 410 del periódico local “La Comuna de Villa Regina” que corresponde a la semana del 28 de septiembre al 4 de octubre de 2011.
El Consejo Comunitario de la Niñez, Adolescencia y Familia de Villa Regina saluda a los estudiantes en su día.
En relación al baile del estudiante, el mismo desea expresar a la comunidad toda su opinión contraria a los comúnmente llamados “escraches” organizados para el baile que se realizará el 21 de septiembre.
En tal sentido, este año el Consejo ha intervenido en diferentes encuentros con los organizadores llamando a la reflexión sobre las consecuencias que estas acciones discriminatorias producen ocasionando humillación y dolor en quienes son afectados.
El artículo 22 de la ley 26061 de Protección Integral de los Derechos de niños, niñas y adolescentes señala:
“Los niños, niñas y adolescentes tienen derecho a ser respetados en su dignidad, reputación y propia imagen. Se prohíbe exponer, difundir o divulgar datos, informaciones o imágenes que permitan identificar directa o indirectamente a los sujetos de esta ley, a través de cualquier medio de comunicación o publicación en contra de su voluntad o la de sus padres, representantes legales o responsables cuando se lesionen su dignidad o la reputación de las niñas, niños y adolescentes o que constituyan injerencias arbitrarias o ilegales en su vida privada o intimidad familiar”.
* Imágenes internet.
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