sábado, 31 de mayo de 2025

Gustavo Favretto. La historia del periodista que volvió a sus raíces para hacer vino en Río Negro.

 



Gustavo Favretto. La historia del periodista que volvió a sus raíces para hacer vino en Río Negro.
La historia del periodista que volvió a sus raíces para hacer vino en Río Negro.

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Después de una carrera en medios y política en Buenos Aires, regresó al Alto Valle para tomar las riendas de la bodega que fundó su abuelo en 1948. Hoy lidera una propuesta de vinos con identidad patagónica, equilibrio entre tradición e innovación, y una impronta muy personal.

Fue movilero en Radio Rivadavia, escribió en medios gráficos y trabajó como asesor de prensa en el Congreso Nacional. Pero un día, ese ritmo vertiginoso de la gran ciudad dio paso a otra pulsión: volver a sus raíces en Villa Regina, Río Negro. ¿El propósito? Asumir el legado de Ferruccio Favretto, su abuelo inmigrante que llegó desde el Véneto para fundar una bodega que este año cumple 77 vendimias.

Desde entonces, Gustavo Favretto convirtió ese patrimonio en un proyecto de vinos Premium con fuerte identidad patagónica, donde cada etiqueta cuenta una historia y cada botella refleja un compromiso con la tierra, la memoria y el hacer bien las cosas. Esta es la historia de quien pasó de comunicar a protagonizar su propia noticia, con el vino como narrador. De esto charló con Juan Delicias Magazine.

-¿Quién fue Ferruccio Favretto y qué legado dejó en Villa Regina y en la vitivinicultura del Alto Valle?

-Ferruccio fue un inmigrante Italiano que llegó de Italia, de la zona del Véneto, en el buque Conte Verde en 1927. Tenía 19 años. Plantó las primeras vides en 1944. Y en 1948, comenzó a vender vino, acá, en Villa Regina. Él tiró la semilla y sus hijos Juan y Adelino siguieron con la actividad. Yo soy la tercera generación a cargo de la bodega.

Difícil comparar la vitivinicultura de hace 80 años a ésta que vivimos actualmente. Antes era todo muy precario ya que ni corriente eléctrica había. Regina llegó a tener más de 30 bodegas. Hoy quedamos nosotros solamente. En el Valle había mucha uva; ahora es alfalfa, maíz y un poco de pera y manzana. Ya no es el Valle que soñaron los gringos.

-¿Qué recuerdos tenés de tu infancia en la bodega y en relación al trabajo de tu abuelo y tu padre?

-Me crié en la bodega. Trabajábamos de chicos. Siempre fue el negocio familiar. A mi abuelo Ferruccio no lo conocí. Mi papá fue para mí siempre el que manejó la bodega. Él, sin estudios, elaboraba los vinos y hacia los cortes.

-¿Qué sentís que heredaste de ellos?

-Creo que la perseverancia. Dedicarse a esta actividad no es sencillo. Acá no es moler la uva y listo. Hay mucho trabajo atrás. Mi lema fue siempre: hay que seguir... Hubo muchos años malos, pero siempre se siguió intentando de mejorar. Lo que hicieron los que me precedieron ya está. Ahora la idea es mantener e innovar. Ser leal a la propia conciencia.

Del periodismo al viñedo. De codearse con Antonio Carrizo, Llamas de Madariaga, Ernesto Cherquis Bialo, o usar traje y corbata para trabajar en el Congreso Nacional, un día dejó la gran ciudad para hacerse cargo de la empresa familiar que este año cumple 77 años haciendo vino en Villa Regina, Río Negro.

-Estudiaste y trabajaste en Buenos Aires, en medios periodísticos de renombre, ¿qué te llevó a volver a tus raíces?

-Sí, un día largué todo y me fui a estudiar a Buenos Aires. Nada que ver con esto. Estudié periodismo, me recibí y me quedé a trabajar allá. Trabajé en varios medios gráficos; después fui movilero de Radio Rivadavia, en un histórico programa Sexta Edición, creado por Cacho Fontana. Después me quedé sin trabajo. Más tarde, entré al Congreso de la Nación, fui varios años asesor de prensa del político Miguel Pichetto en el Senado Nacional. Y en 2011 volví a la Patagonia, y me hice cargo de la bodega.

-¿Qué aprendizajes del mundo del periodismo aplicás hoy en la bodega?

-Escribo las contraetiquetas de los vinos (se ríe).  ¡Ahí despuntó el vicio!

-Son una bodega muy conocida en el Alto Valle y sus vinos muy consumidos. ¿En qué momento decidiste dar un nuevo impulso a la bodega familiar?

-Desde que volví de Buenos Aires. Acá siempre elaboramos vino en damajuana. La idea fue hacer vinos en damajuana de nivel superior. Siempre se hizo vino en botella de 950cc. Empezamos a elaborar vinos en botellas de 750cc de media a alta gama, incorporamos las barricas, se compró mucha maquinaria nueva, se le puso más tecnología. Y se comenzó a elaborar vinos con distintas técnicas enológicas.

-¿Qué características tienen tus vinos actuales y qué cepas trabajás y por qué?

-Fue cambiando con los años, en sintonía con cómo cambian los gustos. Antes, eran vinos genéricos; ahora, varietales.  Antes, más alcohólicos y concentrados; ahora, más suaves  y más bebibles. Elaboramos Sauvignon Blanc en blancos, y Merlot, Malbec, Pinot Noir, Syrah y Cabernet Franc, en tintos.

"Estamos en Patagonia: aire puro, fresco, sano. Y todo esto da como resultado una gran calidad enológica." Gustavo Favretto Winemaker.

-¿Qué significa para vos hacer vino en Río Negro, lejos del eje de Mendoza-San Juan?

-Río Negro es una provincia más tímida que Mendoza pero con grandes virtudes. Nuestro clima mucho es mucho mejor al de otras regiones; acá, sobra el agua para regar; acá no hay enfermedades en las plantas, no hay plagas. No se pulveriza. Estamos en Patagonia: aire puro, fresco, sano. Y todo esto da como resultado una gran calidad enológica.

-¿Sentís que hay una identidad enológica propia del Alto Valle? ¿Qué la distingue?

-Sí, obviamente. Hace un par de años un vino rionegrino fue elegido como el mejor vino del mundo por el crítico James Suckling. (NdR: se refiere al Pinot Noir de Bodega Chacra, de Mainqué) ¿Sabés lo que fue que un vino de un pueblo rionegrino se instalara en los titulares de los grandes medios? ¡Fue fantástico!  Instaló la zona, nos levantó a todos. Nos hizo visibles.

-¿Cómo ves la evolución del vino del Valle en los últimos años?

-Desde que se supo que la cepa de ese vino ganador era Pinot Noir, desde entonces, nos levantó la venta de esa variedad. La gente pedía Pinot de Patagonia. Creo que es la variedad insignia. Obviamente que el Merlot también le pelea, pero unos cuerpos más atrás. Igualmente, aquel enófilo curioso resalta el Cabernet Franc y el Semillón del Alto Valle.

-Además de todo esto, creaste un museo en el predio de la bodega. ¿Qué se puede encontrar allí?

-Siempre tuvimos venta de vino en la bodega, pero muchos clientes querían sacar fotos y conocer más de la historia. Entonces, en 2022, inauguramos una sala de degustación y recepción del turista. Se recorre la bodega desde la parte más antigua hasta lo más nuevo y terminamos en la sala y degustamos 3 vinos con una picada.

-¿Por qué tuviste esa necesidad de preservar y contar la historia vitivinícola local?

-La idea fue tratar de que no se olvide la historia de los que estuvieron antes que nosotros. Lo que sufrieron. Las cosas que vivieron. Ahora el Valle se ve plantado y florido. Pero, cuando ellos llegaron, esta zona era puro alpatacos y jarillas, médanos, tierra virgen y dura. Y no había una Caterpillar: se hizo todo a caballo, pico y pala.

-¿Cómo te imaginás la bodega en los próximos años?

-Imagino seguramente que estaremos creando vinos nuevos, cortes nuevos. ¡Y celebrando en 2048 cuando la bodega cumpla 100 años!








Publicado en Juan Delicias Magazines.

Imágenes de Juan Delicias Magazines.

https://juandeliciasmagazine.com/la-historia-del-periodista-que-volvio-s-raices-para-hacer-vino-en-rio-negro/

¿Cómo avanza Vaca Muerta Oil Sur?

 


¿Cómo avanza Vaca Muerta Oil Sur?


Hemos dicho varias veces desde Energía 360 la importancia del proyecto Vaca Muerta Oil Sur: es la pieza clave en la transformación de la energía en Argentina, consolidando una nueva era para la exportación de hidrocarburos desde la región.

¿Cómo avanza el proyecto en territorio rionegrino? De acuerdo a las inspecciones realizadas por la Secretaría de Hidrocarburos de la provincia avanza 2,5 km por día con soldaduras automatizadas, superando las 100 soldaduras diarias.
La visita técnica, de la que también participó personal de YPF, se enfocó en los sectores donde se están realizando soldaduras automáticas y en la Estación de Bombeo EB1, uno de los nodos esenciales del sistema.
“El monitoreo permanente por parte del Estado provincial nos permite verificar que se cumplen los estándares de calidad y seguridad en cada fase de la obra”, señaló Amelia Lapuente, técnica de la Secretaría.

Avance acelerado con tecnología de punta

Durante la recorrida, los inspectores constataron la eficiencia del sistema de soldadura automática en campo, una tecnología asistida por robots y operada por soldadores altamente calificados. Actualmente, el ritmo de trabajo permite realizar más de 100 soldaduras por día, lo que se traduce en un avance de 2,5 kilómetros de cañería diarios.

Las uniones son evaluadas al 100% mediante ultrasonido, garantizando la integridad estructural de la obra. “Es un proceso que combina innovación y precisión, clave para una infraestructura de esta magnitud”, explicó Lapuente.

Otro de los puntos inspeccionados fue la Planta de Doble Junta en Chichinales, que comenzó a ser desarmada para su traslado al kilómetro 190 de la traza, donde se instalará el nuevo campamento para avanzar con el segundo tramo del proyecto. Esta planta permite unir caños de 12 metros en tubos de 24, lo que optimiza el ritmo de instalación, lo cual ya fue verificado en Chichinales recientemente.

El VMOS tendrá 437 kilómetros de extensión y una terminal de exportación en Punta Colorada, con capacidad inicial para transportar 180.000 barriles diarios y proyectando llegar a 550.000 en 2027. Integrado por un consorcio de empresas liderado por YPF, este oleoducto permitirá a la Argentina exportar petróleo a gran escala, con un potencial estimado de ingresos por 15.000 millones de dólares hacia 2030.

Publicado en ENERGÍA360.

https://energia360.com.ar/como-avanza-vaca-muerta-oil-sur/

https://energia360.com.ar/

jueves, 29 de mayo de 2025

Plaza Belgrano: 70 años de recuerdos que estrenan nueva vida.

 


Plaza Belgrano: 70 años de recuerdos que estrenan nueva vida.

Inaugurada en 1958, la plaza vio crecer a generaciones enteras de chicos que, durante casi siete décadas, disfrutaron de sus juegos originales. Hoy, ese rincón cargado de recuerdos entra en una nueva etapa, con juegos renovados, más seguros y pensados para el disfrute de toda la comunidad.

La Plaza Belgrano, uno de los espacios verdes más emblemáticos del barrio homónimo en Villa Regina, está atravesando una transformación histórica. 

“Renovamos por completo el sector de juegos de la plaza, incorporando equipamiento moderno y seguro para el disfrute de chicos y grandes”, explicó Daiana Moraga, integrante de la comisión que lleva adelante el proyecto.

Entre los nuevos juegos se destacan:

-Mangrullo diversión

-Hamacas con hamaca integradora

-Sube y bajas

-Calesita reforzada.

Además, se incorporaron máquinas de ejercicio para fomentar hábitos saludables y se mejoró la iluminación, permitiendo disfrutar la plaza con mayor seguridad en más horarios del día.

Daiana también recordó que los antiguos juegos incluían sube y bajas, hamacas, un pasamanos y dos toboganes de chapa —uno grande y otro más chico— que permanecieron en uso durante más de 70 años“Los toboganes de chapa formaron parte de los recuerdos de generaciones enteras. Pero con el paso del tiempo, se fueron deteriorando y ya no cumplían con las condiciones de seguridad necesarias para los más chicos”, explicó.

Por eso, se tomó la decisión de reemplazarlos por un espacio de juegos moderno y seguro, con un diseño que contemple las necesidades actuales. “Es parte del compromiso que tenemos con la comunidad para seguir mejorando nuestros espacios públicos y cuidar a quienes más los disfrutan”, agregó Daiana.

En cuanto al uso de los juegos, recomendó que el mangrullo sea utilizado por niños de hasta 8 años, para preservar su integridad. “Los juegos son muy lindos y, sobre todo, seguros. Siguen la misma línea que se colocó en la Plaza de los Niños y el Pulmón Ecológico, que fueron muy bien recibidos por los chicos. Ver tantos niños jugando con alegría desde el día de la inauguración es la mejor respuesta que podíamos esperar”, dijo.

La inauguración oficial será el viernes 6 de junio a las 17:30 horas

La Plaza Belgrano había sido renovada por última vez en 2022, cuando se construyeron veredas de hormigón, se instaló luminaria LED, se mejoraron juegos existentes, se creó un playón de básquet y se renovó el mobiliario urbano.

Regina cuenta con más de 15 plazas además de otros espacios verdes, y la Plaza Belgrano es una de las más antiguas. Su historia está profundamente ligada al crecimiento del barrio, que comenzó a tomar forma en 1958, cuando fue loteado y se proyectó un sector para plaza. El deseo de arbolarla y diseñarla surgió de vecinos y concejales que, con mucho esfuerzo comunitario, impulsaron su creación.

La piedra fundamental se colocó el 20 de junio de ese año, en el Día de la Bandera, y al año siguiente, gracias a una colecta, se colocó el busto de Manuel Belgrano.

Este valioso registro histórico fue compartido con LCR por Magalí Catriquir, encargada del Museo Felipe Bonoli, y pertenece al libro Me lo contó mi abuelo de la escritora reginense Silvia Zanini.

En los años 70, la plaza comenzó a recibir mayor atención municipal. Se convirtió en punto de encuentro, no solo por su verde, sino también por su particularidad: la propaladora. Desde sus parlantes se oía música, anuncios y hasta partidos de fútbol. Sonidos que aún resuenan en la memoria de muchos vecinos.

Hoy, con nueva cara, la plaza que vio crecer a Regina y su gente, se prepara para recibir otra generación de sonrisas, juegos y encuentros.

Por: Celeste Cerezuela.

Una postal de los comienzos. (Foto extraída de 'Me lo contó mi abuelo', obra de Silvia Zanini)

Inauguración del busto al General Belgrano. (Foto extraída del libro 'Me lo contó mi abuelo', de Silvia Zanini)

*** Publicado en LA COMUNA DE VILLA REGINA.